Carlos Pauner, a por los catorce a la carrera |
Carlos Pauner llevaba tiempo dándole vueltas a una difÃcil elección: podÃa ir al Cho Oyu, que tal vez enlazarÃa luego con Shisha Pangma, o podÃa ir al Annapurna. Hasta hace pocos dÃas, la primera parecÃa ser la opción definitiva. AcompañarÃa al Cho Oyu a la guipuzcoana Edurne Pasabán y a oro grupo de montañeros del PaÃs Vasco. Asà podrÃa llevarse dos ochomiles en un solo viaje. La otra opción era más un trabajo sucio que sabÃa que, antes o después, tendrÃa que hacer. A Carlos no le gusta el Annapurna. Tal como relataba en una entrevista anterior concedida a Barrabés, no le gusta esa montaña, a la que encuentra expuesta y dura, pero sin la belleza de otras escaladas. Por eso, pensó que, ya que el tÃtulo de "catorceochomilista" no puede obtenerse sin este pico (que Alberto Iñurrategi y Juanito Oiarzabal, por ejemplo, dejaron para el final de la lista), esperarÃa a que saliera una expedición que le convenciese especialmente. Esta se ha formado, y sus componentes son tan convincentes que Pauner no ha podido negarse. La fotman nada menos que Mario Merelli y Silvio Mondineli (que están enlazando ochomiles como si recogieran setas) y Abele Blanc, para quien, directamente, el Aannapurna será su último ochomil. Entre los cuatro suman más de cuarenta ochomiles. Las similitudes con la pasada expedición de Alberto iñurrategi son, pues, notables: Ambos son equipos extraordinariamente fuertes; en ambas va un español; en las dos hay un componente que, en caso de éxito, se convertirÃa en catorceochomilista... pero es que, además, las dos han escogido la misma ruta: la abierta por Loretan y Joos en 1981, la interminable arista suroeste.
Caros ha comentado que se encuentra muy motivado, aunque teme el estado en que puede encontrarse la zona. “Sé que ha nevado muchÃsimo, y que la montaña está especialmente cargadaâ€.El ochomilista parte en dos semanas hacia el Annapurna |
A finales de la semana pasada, Pauner confirmó en rueda de prensa su intención de dedicarse por completo a la ‘carrera de los catorce’. Apoyado por el Gobierno de Aragón (que ha aportado 430.000 €) ha dejado su trabajo y ha fijado su residencia en Zaragoza, desde donde se volcará en exclusiva a subir las montañas más altas del planeta. Y deprisa. Carlos, que ya ha alcanzado la cima del K-2 (en 2001 junto al fallecido Pepe Garcés) y el Makalu (la pasada primavera), tiene muy bien planeada una estrategia que, de culminar con éxito le llevarÃa a ‘tachar’ de la lista los nueve que el faltan en cinco años o cinco años y medio, a ritmo de dos expediciones por año y tratando de conseguir más de un pico en algunas de ellas (como el caso antes citado de Cho Oyu más el Shisha Pagma o el de los dos Gasherbrum, en el Karakorum). De esta manera, el aragonés se plantea viajar a por otra ‘de las difÃciles’ la próxima primavera: el Kangchenjunga, una de las montañas a su entender que inspiran más respeto, será el objetivo. Después, en verano, llegará el turno del Nanga Parbat. En cuanto al grado de ‘optimismo’ de estos planes, Pauner afirma que ha calculado un 80% de éxitos para establecer esos plazos. De cumplirse, Pauner se convertirÃa en el alpinista que consigue ‘los 14’ en menos tiempo.
En cualquier caso, antes de que ocurra todo esto, Carlos Pauner debe concentrarse en su próxima y difÃcil montaña. El dÃa 3 de septiembre partirá rumbo a Nepal, hacia el monasterio de Pokhara, de donde saldrá a pie hacia el macizo de los Annapurnas.