Mientras esperan que el tiempo permita su gran objetivo, el Chañi Chico, los Pou aclimatan con actividades preciosas y que para el común de los mortales sería un objetivo en sí mismos. Las dos vertientes sur del Morro Von Ronsen y la Aguja Negra estaban inescaladas. Esta última actividad nos sorprende además porque, en cierta forma, no está realizada en el medio en el que suelen moverse, aunque no deberíamos olvidar que Eneko es un gran alpinista y esquiador extremo.
Así lo cuentan ellos:
“Ni soñándolo habríamos imaginado que en una semana íbamos a abrir dos vías en el macizo del Chañi. Además, dos primeras por la cara sur, que en este hemisferio es la norte nuestra. Las dos cumbres –Morro Von Ronsen y ahora Aguja Negra- están ascendidas un montón de veces por el norte andando, pero hasta ahora ninguna de las dos había sido escalada por su vertiente más abrupta.
Si al principio de semana fue la arista de Pachamama 5+/6a/1000 metros (700 de desnivel), a finales de semana cambiamos los pies de gato por los piolets y crampones y hemos abierto la vía Vitoria-Gasteiz (4/80º/550 metros). Como su propio nombre indica es un homenaje a nuestra ciudad, una ciudad netamente deportiva, y a la que hace mucho le debíamos nuestros respetos.
Pero como podéis imaginar abrir VG no fue un camino de rosas. Seis horas nos costó una escalada que consta de un cono inicial, una primera cascada de 70º y 60 metros, una canal de nieve, otra segunda cascada de 75-80º, y una canal final que te lleva hasta el collado. De aquí en media hora haces cumbre en la Aguja Negra de 5.150 metros. En total 12 h 30’ de actividad (escalar, filmar, fotos, contemplación del paisaje…) que nos devolvieron al refugio, en donde nos esperaba Eduardo, totalmente derrengados. No hay que olvidar que los 5.000 metros hacen daño, y aún más cuando las actividades se llevan a cabo en estilo alpino."
Página web de los Pou: www.pouanaiak.com