Los escaladores madrileños Borja Ayed y David Bautista llegaron a Huaraz el día 31 de mayo. A los dos días se juntaron con Alejandro Bonilla, que venía de su viaje por Cochamo, en donde ha estado abriendo con un equipo alemán la vía “Las Venas Cerradas de América Latina” (7a+, 330m).
Borja y David comenzaron a contactar con la altura en la escuela de escalada de Hatun Machai, roca volcánica a 4200m. La segunda jornada Borja tiene problemas con la altitud y pasa el día entero de reposo.
Tras un día de descanso inician la ascensión del nevado Vallunarraju (5686m), alcanzando la cima en tan solo 5 horas y media. Se trata de una actividad que normalmente requiere una logística de dos días.
Y ya comenzaron a escalar. Escalan a más de 4000m “Karma de los Cóndores” (7b, 350m), una delicatessen de la escalada en fisura, conocida como la Astroman peruana. Encadenan todos los largos duros a vista, excepto el 6º, en donde David cae a tan solo 2 metros de la reunión...la altura no perdona.
Tras esta escalada ya están perfectamente aclimatados, y ahora se encaminan a la Esfinge para repetir alguna de sus vías más famosas, de más de 600m, hasta su cumbre. Y de ahí a su proyecto final: abrir una nueva vía en la pared del Puscanturpa (5700m), una tapia con alto compromiso: escalada a mucha altura, dos días de aproximación. Para este proyecto se unirá el escalador madrileño Daniel Crespo, que termina su concentración con el Equipo Español de Alpinismo, que se encuentra por aquellas tierras.