Dentro de la habitual pasión que la meteorología y sus fenómenos desata entre los amantes de la montaña, el invierno es la estación que cuenta con mayores admiradores. Con mucha diferencia.
Hasta ahora, en lugar de invierno, hemos sufrido en la península algo horroroso que en algunos casos y foros se ha calificado con epítetos que han supuesto la sanción temporal del usuario por parte de los moderadores. Así que no es de extrañar que ante la perspectiva de una ola de frío siberiano los lugares habituales de reunión cibernáutica de los apasionados al tiempo estén verdaderamente alterados. Sobre todo cuando la entrada es tan difícil de predecir que a pocos días vista es definida por algunos como “otro 56” (en referencia al año en el que el mar llegó a helarse en las rocas de Girona), mientras que otros intentan calmar los ánimos ante el posible (y enésimo) batacazo de este invierno.
“Será histórico”, dicen los más exaltados, esos personajes geniales y apasionados por la meteo que discuten por las cantidades de nieve y las temperaturas mínimas de sus lugares de origen frente a las de los demás de una forma muy similar a la que emplean para sus diálogos los forofos del Barça y el Madrid en los postpartidos de los bares. “Es la octava vez que decís que va a ser histórico en los dos últimos inviernos”, les contestan los demás.
Pero sea como sea, parece cierto que la tendencia cambia, y se hiele o no el mar en las rocas de las playas de Girona, a partir del jueves entra mucho frío por el noreste, procedente de Siberia. Lo complejo de la situación impide a los meteorólogos concretar el alcance e intensidad de la entrada. Y lo seco del aire continental evita que se manifiesten acerca de si será sólo frío, o también llegará la nieve.
Con todo, después del invierno que llevamos, ya era hora de poder lanzar una alerta meteorológica de cara los días venideros. Una alerta en condiciones, de las de verdad. Así que no os olvidéis, a partir de mañana, de consultar los partes para cualquier salida que penséis realizar, porque la cosa puede ser muy seria. Que no pille a nadie desprevenido.
Y una vez prevenidos, que esto no impida disfrutar de la situación a los amantes de estos meteoros, para los que una entrada así es un verdadero regalo que se lleva tiempo esperando.
También puede no ser para tanto. Pero si la predicción meteorológica fuera una ciencia exacta, qué aburridos iban a estar los apasionados al tiempo en sus foros...sería como si los árbitros de fútbol no se equivocaran nunca...¿de qué iban a discutir los aficionados?
Este pasado fin de semana, en cualquier caso, la nieve por fin visitó en cantidades significativas el sur del Pirineo. Os dejamos unas fotos de cómo amaneció Benasque el domingo por la mañana. En el momento de escribir estas líneas parecer que comienza a nevar otra vez en el valle.
Deseamos que estas fotos sean las primeras de una larga serie. Es cierto que hasta ahora la cosa ha pintado más bien mal. Pero si la cosa cambia, aún no ha empezado febrero, y todavía nos quedan unos cuantos meses de disfrute del frío, el hielo y la nieve antes del final de la temporada.