Los rÃos han comenzado a desbordarse en algunos puntos del valle de Benasque y de la Val d'Arán. La carretera entre Eriste y Benasque está cortada, el valle está incomunicado ya que ha habido que cortar la carretera del Congosto desde Campo. En Benasque y los pueblos del valle se ha activado la alerta, la Guardia Civil toma posiciones, y ha habido que evacuar el colegio y un edificio. En este momento el agua ya no es potable.
También han quedado aisladas unas personas cerca de Llanos del Hospital. Protección Civil baraja las posibilidades de evacuación, están en permanente contacto con ellos, y se encuentran perfectamente.
La situación es similar en la cuenca del Garona, Val d'Arán, en donde 200 personas ya han tenido que ser evacuadas.
Aunque se prevé que las lluvias continúen durante unas horas, se espera que la situación esté controlada en todo momento. Es la consecuencia de un estado inusual de la montaña: a 3 dÃas de la llegada del verano, las cotas medias del Pirineo central seguÃan manteniendo unas grandes cantidades de nieve propias del invierno.
Esto ha permitido una primavera maravillosa, tanto por la belleza del paisaje con explosión primaveral en el fondo de los valles, en contraste con las montañas invernales, como por las actividades de esquà y alpinismo que se han podido realizar, pero ahora, con la llegada de estas fuertes lluvias que caen desde hace algunos dÃas, se ha sumado la gran cantidad de agua caÃda con la nieve que ésta ha deshelado, provocando esta situación.
Evidentemente, no es la primera vez que algo asà ocurre. Algunos de nosotros recuerdan cuando, siendo niños, tuvieron que subir al cementerio por la riada, y todo el pueblo de Benasque tuvo que ser desalojado. En el primer cuarto de siglo XX, el puente románico medieval del pueblo fue arrasado también en un deshielo tardÃo.