Alpes: 1º descenso integral con esquís del Picco Luigi Amedeo, 4.470m, Mont Blanc

Picco Luigi Amedeo, descenso con esquís. Foto: Thomas Crauwels

El Picco Luigi Amedeo (4.470m) está situado en la vertiente italiana del Mont Blanc. Por sus laderas transita la arista Brouillard, meta y reto de muchos alpinistas. Sin embargo, en esta ocasión no destaca por sus escaladas, sino por su primer descenso integral con esquís. Al parecer, la parte alta jamás había sido esquiada, pero bajo el paso de Emile Rey, en la vertiente este, había un descenso de Denis Trento.

El descenso integral lo realizaron hace 2 días Vivian Bruchez y Guillaume Pierrel, aprovechando las excelentes condiciones de nieve que aún hay en buena parte de los Alpes, y que hace que estamos ante una primavera-comienzo de verano en el que hay más noticias sobre actividades con las tablas que con los piolets.

Bruchez y Pierrel, descenso Luigi Amedeo con esquís. Foto: col. Bruchez

Según Bruchez, no tenían nada claro lo que se iban a encontrar, porque no habían podido trazar una linea. Así que la única opción era adentrarse y ver si conseguían solucionar el laberinto.

Los problemas comenzaron ya en la subida, especialmente en la parte baja, en el glaciar Brouillard aún de noche. “Encordados, avanzamos paso a paso. Siento el latido de mi corazón resonando...¡siempre es mejor que oír retumbar los seracs!” Finalmente, una vez en la cumbre, a las 11 de la mañana, ven que es posible comenzar el descenso con las tablas. Piensan que la pendiente final, normalmente helada, a esa hora ya debe de haber transformado, pero no tienen tiempo que perder, sin no quieren que esa transformación sea mayor de lo deseado.

Bruchez y Pierrel, descenso Luigi Amedeo con esquís. Foto: col. Bruchez

Se ponen los esquís en una repisa 50 metros bajo la cima. “Los giros se suceden y nuestra respiración se acelera. Nuestras piernas nos imploran que paremos. 4 rápeles nos permiten alcanzar el collado de Emile Rey a la 1pm. La nieve se ha reblandecido por el sol, pero permanece lo suficientemente estable como para permitirnos alcanzar el glaciar Brouillard sin incidentes. La niebla se suma a la fiesta durante el regreso a través del glaciar, pero una ventana nos permite encontrar el camino de regreso al refugio Monzino. Tuvimos que trabajar duro, pero fuimos recompensados por lo que vivimos allí arriba”.

Bruchez y Pierrel, descenso Luigi Amedeo con esquís. Foto: col. Bruchez