Un combo entre escalada y parapente ha permitido a Benjamin Védrines y Nicolas Jean escalar 3 vías duras a Écrins, Meije y Pelvoux en el día.
Benjamin Védrines y Nicolas Jean, Pelvoux, Écrins y Meije en el día. Foto: Benjamin Védrines
“Un día memorable para los dos. Sin cronómetro, bajo el signo de la amistad, del placer de estar en la montaña y de lograr un desafío tan complejo. ¡Gracias, vida!”
Son las palabras de Benjamin Védrines quien, una vez más, realiza una gran actividad cercana, en sus montañas, de las que le están convirtiendo, poco a poco, y junto a sus escaladas en las cordilleras de Asia, en uno de los mejores representantes del alpinismo moderno, rápido y alpino.
En esta ocasión, Nicolas Jean y él han realizado 3 duras escaladas en el día, conectando el Pelvoux, la Barre des Écrins y la Meije, empleando el parapente para los descensos y aproximaciones. En total, 5.500m de desnivel positivo, de los cuales 2.800m han sido de pura escalada.
Benjamin Védrines y Nicolas Jean, Pelvoux, Écrins y Meije en el día. Foto: Benjamin Védrines
Partieron de Pré de Madame Carle para escalar el pilar este del Pelvoux (TD, 830m), volando en parapente hasta el pie de la Barre des Écrins, alcanzando su cumbre por el pilar sur (TD, 1.300m), y desde allí, de nuevo con el parapente, volar hasta Châtelleret, y ascender la vía Pierre Allain (TD, 1.000m) a la cumbre de la Meije, descendiendo en vuelo desde el refugio de Aigle hasta Villar d’Arene.
“Es un proyecto que imaginé desde mis primeros vuelos hace 6 años”, confiesa el francés. “¡El sueño de correr y volar! Hermosas montañas, altas y cargadas de historia, escalada típica del macizo de Écrins e increíbles transiciones en parapente”.
Benjamin Védrines y Nicolas Jean, Pelvoux, Écrins y Meije en el día. Foto: Benjamin Védrines
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