
La cara NO del Annapurna tan solo tiene una ruta abierta, y una ascensión: la realizada durante 5 días de 1985 por Reinhold Messner y Hans Kammerlander. Adam Bielecki y Felix Berg se proponen realizar la segunda vía hasta cima por esta impresionante muralla.
Además de la cumbre de Messner y Kammerlander, a lo largo de la historia ha habido diversos intentos de superar la enorme pared, todos infructuosos: Troillet y Steiner lo habían intentado un año antes, en 1984, en 1991 fue el turno para Slavc Sveticic, y ya en 2017, los mismos Adam Bielecki y Felix Berg, junto a Louis Rousseau y Rick Allen, ya probaron esta cara de la montaña, siendo detenidos por el mal tiempo a 6.700m de altitud.

En esta última ocasión, fue una carambola la que les llevó a esta montaña, tras cerrar China la frontera tibetana y con ello su objetivo: nueva vía en la cara norte del Cho Oyu. La montaña impresionó a Bielecki y Berg, y desde entonces planeaban la vuelta. No emplearán sherpas, ni oxígeno, ni cuerdas fijas, y además son conscientes de que es muy probable de que el trazado elegido tenga un punto de no retorno en el que sea muy difícil el descenso y la posibilidad más aceptable de regreso pase por la cumbre y descenso por otra vía.
Para aclimatar han decidido afrontar otra aventura en si misma: los 7.227m del Langtang Lirung, montaña a la que ya han llegado, y que a pesar de que varias expediciones han intentado su cumbre, la última vez que se holló fue en 1995. De hecho podría afirmarse que, excepto por la altura, es tanto o más complicada que la cara NO del Annapurna.

Hay un triste recuerdo ligado al Lantang Lirung: en 2009, perdió allí la vida el gran alpinista esloveno Tomaz Humar en 2009, durante un intento en solitario.
Adam Bielecki está patrocinado por Black Yak