El campo base del Manaslu va a ser uno de los lugares más concurridos de Nepal en el postmonzón. Según fuentes nepalíes, (aunque ya se sabe que respecto al número de expediciones, con las fuentes nepalíes, hasta que no se llega a la montaña no se confirman definitivamente los datos), 20 expediciones han recibido ya su permiso para ascender este ochomil, la mayoría agencias comerciales que, ante el cierre del territorio tibetano y la imposibilidad de ascender al Cho Oyu, han desviado a sus clientes a esta montaña. Que aunque no es muy difícil técnicamente, a diferencia del K2, tiene zonas muy expuestas. Cuando informamos de la expedición alavesa con Juanito Oiarzábal, ya comentamos que su intención primera era el Cho Oyu, pero que se desviaron al Manaslu al conocerse el cierre de fronteras.
Entre tanta expedición comercial, Edurne y Al Filo van a intentar el que sería el decimoprimer ochomil para Edurne. Va a estar muy bien acompañada, por Antonio Perezgrueso, Ignacio Delgado, Esther Sabadell, Ferrán Latorre, Mikel Zabalza, Asier Izagirre, Alex Chicón y Juanjo Garra. Edurne afirma que entre ellos, amigos y conocidos de siempre, se siente muy arropada en el mes de campo base y expedición, y eso es fundamental para ella.
En estos momentos, la mujer con más ochomiles es la austriaca Gerlinde Kaltenbrunner, con 11. Después vienen Edurne y la italiana Nives Meroi. Pero esto hay que entenderlo en su justo término: no se trata de una competición. Como afirma Edurne, es una sana rivalidad entre amigas.
La ovetense Rosa Fernández, según informa la Nueva España, pretendía ir al Cho Oyu, en el que sería su quinto ochomil, pero el cierre de fronteras ha provocado su desvío al Manaslu.
Mucha suerte para todos, y esperemos que la masificación que esta temporada va a sufrir esta montaña no traiga ningún problema para nadie.
