El video sirve de presentación para la página change-movie.com, dedicada a la película que pronto podrá verse sobre la experiencia noruega de Adam Ondra durante el pasado verano y otoño, que culminó con la escalada de Change, 9b+, probablemente la ruta más dura del planeta.
Y demuestra que, como todo hijo de vecino, el checo también ha tenido que tirar de lo que había para poder escalar. Aunque las nuevas generaciones están más acostumbradas a los plafones y rocódromos, los escaladores de cierta edad recordarán perfectamente los insólitos lugares ciudadanos en los que hubo que practicar años atrás como única opción. Hubo quien incluso llegó a crear graduaciones y rutas de escalada urbana.
Una buena manera de empezar el año con el mensaje de Adam Ondra: “No importa en donde estés, no importa quién seas, no importa lo buenos que sean los rocódromos o paredes que tengas al lado de casa; lo que verdaderamente importa es el deseo de dar el 1º paso, de realizar un cambio: tan solo sal ahí fuera, y hazlo.”