Nueva vía en el Baintha Kabata, 6.290m, Della Bordella, Schüpbach y Welfringer

Su intención era abrir ruta en El Ogro. Pero el mal tiempo lo ha impedido, y Matteo Della Bordella, Silvan Schüpbach y Symon Welfringer escalan una nueva vía en el Baintha Kabata, montaña cercana de 6.290m.

El Baintha Kabata. Foto expedición, cortesía Club Alpino ItalianoEl Baintha Kabata. Foto expedición, cortesía Club Alpino Italiano

Hace 1 mes informábamos sobre la expedición que los italianos Matteo Della Bordella y François Cazzanelli, el suizo Silvan Schüpbach y el francés Symon Welfringer iniciaban, con un objetivo claro: ser la 4ª cordada en conseguir hacer cumbre en la legendaria cumbre de El Ogro, o Baintha Brakk, montaña de 7.285m situada en la región del Pammah Muztagh, en el Karakorum central.

Pretendían hacerlo a través del inescalado pilar oeste, pero una combinación del habitual mal tiempo de la zona, con cantidades ingentes de nieve, junto a temperaturas altas, lo ha hecho imposible. Se les acababa la estancia, y Cazzanelli, de hecho, ya regresó de la expedición. Pero los otros 3 miembros aguantaron un poco más y, aprovechando una pequeña ventana de buen tiempo, decidieron encaminar sus pasos hacia el Baintha Kabata, montaña cercana de 6.290m cuyo nombre en Urdu significa "El hijo del Ogro". Fue escalada por primera vez en 2008 por Colin Haley y Maxime Turgeon.

Esto exigió a Della Bordella, Schüpbach y Welfringer, tras una aproximación de 16 kilómetros con las tablas, una escalada de 1.000m, muy lógica, con dificultades de hasta 7a/M5, a la que han bautizado como The Alien Face. Según Symon Welfringer, "el nombre es debido a las incursiones alienígenas que observamos durante nuestra estancia", quiera decir esto lo que quiera decir.

Según afirma Della Bordella, a través del Club Alpino Italiano, tardaron dos días en completar la escalada: el primero subieron los primeros 700 metros, plantando la tienda en una campa de nieve; el segundo hicieron cima y descendieron. “¡Qué satisfacción y suerte haber tenido esta pequeña ventana de buen tiempo al final de la expedición!”, afirma el italiano. “Cuando llegamos a cima ya volvía a nevar”.

No era su objetivo principal pero, aunque “desanimados por ello, volvemos con una nueva ruta respetable a una hermosa montaña”.

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