
En este artículo os explicamos todos los tipos de crampones y su uso, facilitando vuestra elección a la hora de comprar un par.
Un poco de historia
Si el piolet es el símbolo del alpinismo, es con permiso de los crampones.Los crampones surgieron a su par, pero fueron un tiempo olvidados en favor de las botas herradas hasta, aproximadamente, la aparición de la suela Vibram.
Mientras el agua se siga congelando en las montañas (esperemos que sea por mucho tiempo), necesitaremos crampones para ir a ellas.
Los crampones hacen falta a la mínima pendiente helada que encontramos. Salvo en el esquí de montaña, donde se usan puntualmente, normalmente nos los ponemos para el primer paso delicado y ya no los quitamos hasta estar de vuelta, o sea que con ellos pisamos por nieve, hielo, roca, tierra y vegetales diversos.
Esto supone un trabajo enorme: sea cual sea la actividad que hagamos con ellos, son una parte del equipo que sufre mucho, y es sensato y altamente recomendable comprarlos de calidad.
Gran polivalencia
Antes de comenzar, nos gustaría destacar una de las principales características de los crampones: su polivalencia.Así como los piolets son herramientas especializadas -un piolet de una disciplina funciona para otra, pero bastante mal-, con los crampones ocurre lo contrario: los de una disciplina, si están bien afilados, funcionan en las otras bastante bien.
Probad a caminar con crampones de escalada: se camina bastante bien. Ahora probad a escalar con piolets de escalada y crampones de marcha: ¡se escala bastante bien! Sin embargo, usar un piolet de escalada en piolet bastón; o escalar con piolets clásicos...resulta bastante más incómodo.
Es de suponer que esto se debe a que la variedad de formas entre piolets distintos es más acentuada que entre crampones distintos, que básicamente tienen la misma cantidad de puntas, son similares en tamaño, y orientadas y ubicadas también de forma parecida.
Anatomía de un crampón
Partes
En todo crampón se diferencian dos partes:
- Trasera, que conforma el talón
- Delantera, para la zona del metatarso y la puntera
Están unidas por una barra agujereada, u otro sistema de regulación de talla.
Por debajo, normalmente en el perímetro, se encuentran las puntas, organizadas en pares más o menos simétricos, y en el espacio interior se ensambla alguna suerte de sistema anti-zueco, que evita que la nieve se pegue al metal al andar y nos haga patinar.
Por encima se instalan sendas fijaciones (que pueden ser de "correas", "automáticas" o "semiautomáticas") para el talón y la puntera de la bota. Actualmente todo crampón ya no es perfectamente simétrico sino que presenta una curvatura para adaptarse a la forma del pie, quedando la hebilla de la correa siempre en el exterior; y por supuesto un crampón y su pareja sí que son perfectamente simétricos entre si, uno es el reflejo del otro.
¿Tallas de crampón?
Si hay tallas de calzado, evidentemente el crampón necesita tallas o regulación.En la mayoría de los casos no tienen tallas, o tienen un par de tallas. Una desde el treintaytantos hasta el cuarentaypoco, y otra desde el cuarentaypoco hasta el cuarentaymuchos.
El resto se hace regulando el crampón en la bota, hasta conseguir la longitud exacta, por medio del sistema de ajuste que incorpora la barra de unión de delantera y trasera. Antiguamente se regulaba con herramienta, hoy es muy sencillo sin necesidad de ella, tan solo con las manos.
Geometría. Los pares de puntas
Aunque todas las puntas son básicamente para lo mismo, que es clavarse en el hielo o nieve, cada punta lateral de un crampón y su simétrica tienen alguna función concreta en común.Los pares de puntas tienen cierta importancia, y según su tamaño y geometría, un crampón será mejor para una actividad u otra.
Todas las puntas de los crampones trabajan de forma conjunta, especialmente cuando empleamos la técnica de pies planos. Sin embargo, como ocurre con el dibujo de las gomas de la suela en una bota, cada una está diseñada con una misión específica: las frontales, para pendiente, algunas de las traseras para frenar en descenso, las de en medio ayudan en los canteos, etc.
Puesto que casi todos los crampones tienen el mismo número de puntas, sean de escalada o de marcha, la diferencia entre ellos radica en cómo son éstas. Lo veremos en los próximos apartados.
De momento, solo añadir una cosa sobre las pequeñas puntas de apoyo que tienen algunos crampones de escalada y alpinismo en el segundo par de puntas, como puede verse en la foto. Sirven para mucho: entre otras cosas, nos permiten en la vertical, abrazar columnas en un gesto semejante a talonar, homogenizan la pisada dando una prestación más natural al caminar o escalar, mayor diversidad de apoyos, mayores posibilidades al cantear...
Tipos de crampones
1. Por tipo de puntas delanteras
Aunque la división que mostramos a continuación está totalmente implantada y afianzada, introduciremos un pequeño matiz en el siguiente apartado, dedicado al uso por actividad.Pueden ser:
- Crampones de puntas horizontales: Para actividades de nieve y menos técnicas
- Crampones de puntas verticales: Para alpinismo vertical y escalada

¿A qué se debe esta diferencia de orientación en las puntas?
- Al caminar, las puntas verticales se enganchan y son más incómodas, por lo que se prefieren horizontales, que además retienen mucho más en nieve, por su forma de pala invertida.
- Por contra, al escalar, las puntas verticales clavan mucho mejor en hielo, a la manera de un piolet. Salvo con algún perfil en T, su capacidad de retención (su "agarre") en nieve es menor.
- Específicos de escalada, con puntas delanteras verticales
- De alpinismo y montañismo, con puntas delanteras verticales u horizontales
- De marcha, con puntas delanteras horizontales
- Ultraligeros para esquí de travesía
- Para usar en roca o mixto: puntas frontales cortas.
- Para nieve o hielo: puntas frontales largas.
- Punta larga y muy afilada para hielo.
- Punta corta y filo a 90º para roca y mixto.
- Solidez total del conjunto bota-crampón
- Ligereza
- Opciones de regulación (la bota se puede adelantar o retrasar, para usar en roca o hielo, por ejemplo)
- Prácticamente todas las botas rígidas de alpinismo y las botas de esquí de travesía pueden usarse con fijaciones automáticas, semiautomáticas, y de correas
- Prácticamente todas las botas semirígidas de montañismo permiten el uso de fijaciones semiautomáticas y de correas
- Las botas de marcha y senderismo, únicamente con fijaciones de correas
2. Por número de puntas delanteras
Según su orientación y número de puntas pueden ser:Bipunta horizontal
Las puntas delanteras clásicas, con sección horizontal pero con cierta curvatura hacia abajo. Actualmente empiezan a presentar perfiles envolventes (tipo cuchara) para mejorar su agarre en la nieve.En general acaban en una afilada punta para clavarse bien en el hielo (elemento que siempre puede aparecer en la alta montaña) aunque se pueden encontrar algunas más anchas, a modo de destornillador, buscando mayor retención en nieves poco consistentes.

Bipunta vertical
Todo empezó cuando, hace muchas décadas, se pusieron las puntas frontales, y los crampones pasaron de tener 10 a tener 12 puntas. De repente cayeron los mitos de inescalabilidad.Pronto se preguntaron: si poniendo puntas delante pasó todo aquello… ¿qué pasaría si esas puntas fueran como puntas de piolet? Descubrieron que el agarre en hielo era increíblemente sólido y fiable.
Diversas combinaciones, como puntas secundarias o perfiles en T contrarrestan la capacidad de retención en nieve perdida por el cambio de orientación.

Monopunta vertical
No quedó ahí la cosa, y la evolución continuó. ¿Y si en lugar de dos puntas, ponemos una sola, como un piolet? El resultado fueron un tipo de crampones que permiten escalar con una precisión sin precedentes, y hacer movimientos imposibles con punta doble, como pivotar lateralmente.Suele considerarse que la escalada más técnica y elegante con crampones es con monopunta. Muchos usuarios compran crampones modulares, y los usan en modo bipunta sólo hasta que prueban el monopunta y descubren su superior abanico técnico.
En cuanto a la estabilidad… se compensa apoyando el segundo par de puntas.

Modulares
Hoy en día hay unos cuantos modelos modulares que permiten su transformación en monopunta y bipunta, según se necesite.Normalmente, los crampones de marcha y montañismo tienen puntas frontales fijas, mientras que los técnicos tienen puntas intercambiables, y algunos modelos aprovechan este sistema para permitir transformar el crampón en monopunta vertical, bipunta vertical, e incluso también en bipunta horizontal, según la actividad que se vaya a realizar.
Por su parte Petzl ha innovado con un modelo de crampón cuya parte trasera cubre toda la gama, y su parte delantera es la que marca el nombre (Irvis, Vasak, Sarken). Pero además, Petzl vende partes delanteras sueltas, con lo que combinamos una sola trasera con las diferentes delanteras (horizontal, vertical, 10-12 puntas, etc.), evitando tener que comprar un crampón completo para cada actividad.
¿Diez o Doce puntas?
Todavía es muy frecuente escuchar el consejo de "que sea doce puntas". Hubo un tiempo en que era un gran consejo. La famosísima aparición de los crampones de doce puntas consistió en añadir dos puntas frontales a los que hasta entonces había, que eran de 10 y carecían de ellas. Esto permitía usar la nueva técnica de puntas frontales.Por tanto, al decirte que eligieras de 12 puntas, te estaban diciendo que eligieras con puntas frontales.
Hoy en día este consejo puede ponerse en duda en algunos casos, ya que todos los crampones de montaña cuentan con puntas frontales. Los de diez puntas son como los de doce pero sin el tercer par de puntas. La pletina delantera es mucho más corta; y al plegarlos abultan menos; el conjunto es más compacto y ligero.

3. Según actividad
Podría pensarse que está tan implantada la división entre crampones según sus puntas frontales (verticales -alpinismo y escalada en hielo- horizontales -marcha y montañismo-), que este apartado sobra, porque ya ha sido explicado en el anterior.Pero vamos a hacer una pequeña ampliación, principalmente porque hay modelos con puntas horizontales que están hechos para alpinismo o montañismo algo técnico y no pueden ser considerados estrictamente como "de marcha":
Sobre los crampones de alpinismo y montañismo con puntas delanteras horizontales, ocurre que hay modelos que, a pesar de esa orientación de sus puntas, en cuanto a resistencia, resto de puntas, etc, están construidos como crampones técnicos de escalada. No son los ideales para cascadas de hielo o mixto de dificultad, pero funcionan bien en corredores, montañismo con pasos algo complejos, etc. Como además funcionan mejor para andar en nieve en las aproximaciones, hay quien los prefieren para este tipo de actividades.

Los crampones ligeros se emplean principalmente en esquí de travesía. Son realmente ultraligeros, algunos incluso prescinden de la barra central de unión entre la parte delantera y trasera del crampón, sustituyéndolo por cinta o cordino dyneema, y los esquiadores los usan puntualmente mientras ascienden o descienden, en pasos y zonas concretos.

Un consejo importante a la hora de elegir tus crampones
A la hora de elegir un crampón, es importante comprarlo llevando la bota con la que principalmente vamos a usarlo (o probándolo con ese modelo si está disponible en la tienda).Esto es importante porque, si bien hasta hace poco todas la botas de montaña se hacían con un mismo patrón, con la popularización del outdoor, la aparición de suelas inyectadas y la mayor variedad de dibujos y formas ha sido imparable.
A veces nos podemos encontrar con talones que no caben en los crampones por ser muy anchos o levantar mucho, o tacos de la suela que levantan el sistema de regulación, etc.
Otro consejo: compra con visión de futuro...¡los crampones duran mucho más que las botas!
Y otro consejo más, ahora sobre las puntas
Sobre todo si elegimos un crampón modular con puntas intercambiales, independientemente de que estas sean horizontales o verticales, podemos tener en cuenta que:
4. Por su sistema de fijación
Los crampones deben quedar en la bota como parte de ella, sólidamente unidos para que ningún tipo de movimiento o esfuerzo los pueda mover ¡o sacar! Pueden ser:Correas
Es la fijación clásica. Una correa une la parte delantera y la trasera y la sujeta al pie.La correa sobrante se recoge al gusto para que no estorbe. Hoy en día es tan sencillo que casi no hay manera de hacerlo mal.
Este sistema es el más rudimentario y el que menos sólido queda, pero a cambio, de mejor o peor manera, es universal y se puede calzar en cualquier bota, con las excepciones obvias de botas que no quepan, que son muy pocas. La mayoría de crampones con correas se pueden colocar incluso en algo tan voluminoso como una bota de snowboard.

Cada vez más gente utiliza, en nuestra opinión erróneamente, botas de trekking/senderismo flexibles con crampones de correas para terrenos algo verticales (como tresmiles en verano, etc), pero hay que dejar claro que no es lo recomendable. Muchos de ellos descubren después que los crampones tienden a soltarse durante su uso.
El hecho de que unos crampones de correas puedan atarse en cualquier bota no quiere decir que cualquier bota sea segura para ser usada en montañismo y con crampones. ¿Por qué? Las botas flexibles dan muchos problemas en terreno pronunciado y que tiende a la vertical, sobre todo con crampones que no tienen la barra central muy flexible, ya que la bota flexa más que el crampón y tiende a soltarse.
En el momento en el que el terreno se empina, nuestro consejo, por seguridad, es usar siempre bota rígida o semirígida, según la necesidad. Sobre esto, os recomendamos leer este artículo: Calzado de montaña: botas flexibles, semirígidas y rígidas, y su importancia en nuestra seguridad
Y, por si acaso alguien con bota de senderismo se ve en la necesidad de enfrentarse de forma imprevista a un terreno menos de marcha y más técnico en una salida, elegir crampones de correas cuya barra central sea más flexible. El Camp Stalker es un buen ejemplo.
Pero eso sí: siempre recordando que debemos evitar el terreno técnico con ellos; no es una solución total, sino una ayuda para evitar que se suelten fácilmente.

Automáticos
Lo primero: al tratar de los crampones automáticos y semiautomáticos entramos en el terreno de las botas de alpinismo y montañismo, que pueden ser rígidas o semirígidas. Si tenéis dudas sobre cuáles son las que necesitáis, o queréis conocer a fondo sus diferencias y usos, os recomendamos la lectura de este artículo: Cómo elegir tus botas de montaña y alpinismo semirígidas y rígidasDe momento, en esta foto podéis ver una forma rápida de reconocer cada tipo: las rígidas están preparadas para crampones automáticos, y las semirígidas para semiautomáticos:

En los crampones automáticos encontramos un estribo de alambre que encaja en la puntera de las botas rígidas (virtualmente todas las botas rígidas o de esquí vienen preparadas para este tipo de fijación, salvo algunas botas muy ligeras de esquí de travesía) y una leva o talonera que encaja en el talón, también preparado para ello.
Para quien no lo conozca, digamos que es algo así como el sistema de unión de bota y fijación de esquí de puntera y delantera, pero en alpinismo.
Al levantar la leva, con el crampón bien regulado, el conjunto queda firmemente unido, haciendo un característico sonido "clac". Sólo queda lazarnos la correa de seguridad de la talonera, que evita que un engachón en una roca, o cualquier otro elemento, pueda soltar la leva trasera, manteniéndola firme en su sitio.

Sus ventajas son varias:
La mayoría de crampones de marcha no se fabrican con este sistema, y la gran mayoría de crampones de escalada incorporan este tipo de fijación.

Semiautomáticos
Sistema híbrido entre los dos anteriores, combina una puntera "de correa" con una talonera “automática”. Sirve con cualquier bota rígida del mercado y para casi todas las semirígidas. Son polivalentes, pues sirven con botas de invierno y de verano.Pero ojo, no con todas, sólo con las que llevan el inserto trasero característico.
Aunque sirven para uso técnico, perderemos la opción de adelantar o retrasar la bota y abultan más en la mochila. Sin embargo, son una solución excelente para la bota semirígida: mayor solidez que los de correas, mayor ajuste, más fáciles de colocar...

Múltiple
Hace unos años Edelrid "levantó la liebre" que tanta gente demandaba con su modelo Edelrid Shark: unos crampones modulares, con los tres sistemas en uno.
Otros
Grivel también experimentó conjuntamente con Scarpa; y actualmente la gama Grivel SKI-MATIC elimina la leva trasera fijando el crampón por delante, una solución para las botas de esquí cuyo sistema SKI-WALK baja mucho en el talón e interfiere con las taloneras tradicionales, como las Scarpa Alien y algunas más.Por su parte, CAMP ofrece crampones para esquí de travesía con una talonera tipo Low Tech para resolver también estos problemas aligerando al máximo, obviamente sólo apta para botas de esquí con insertos Dynafit.
Otro cantar son los crampones llamados "de competición" estructuras minimalistas que se atornillan bajo botas especiales (fruitboots) para la escalada de dificultad. Hiperespecíficos y antipolivalentes, no se ven por nuestras latitudes, salvo en alguna competición o sector de dry-tooling.
En resumen
Tienda web: www.barrabes.com
Tiendas Barrabes: Barcelona, Benasque, Jaca, Madrid O'Donnell, Madrid Ribera de Curtidores, Zaragoza.