Hace muy poco tiempo habría sido impensable que un medio del calibre y autoridad en el mundo del deporte mundial como L´Equipe se hiciera eco de forma destacada de algo relacionado con las carreras por montaña o el esquí-alpinismo. Sin embargo la aparición de un fenómeno como es Kilian Jornet, además del notable aumento de practicantes y de repercusión de las pruebas, ha propiciado que el catalán haya sido portada de su revista de fin de semana, L´Equipe Magazine.
Afirma que es “malo en terreno llano”, y que no ve antinatural lo que hace ya que “el hombre está hecho para la larga distancia, sólo hay que trabajar esa facultad.” Por falta de trabajo no será: las semanas tranquilas corre 15 horas, y las duras 35 horas. Sin entrenador y, sobre todo, sin asistencia técnica: “las cuerdas fijas, el oxígeno...es como el dopaje. Si hacemos deporte, es también para saber que somos capaces de hacer cosas por nosotros mismos.”
No elude temas delicados, como el doping: “paso de 25 a 30 controles por año, y tengo que estar obligatoriamente localizable siempre.” Sobre este tema, opina que “el dopaje no tiene que ver con el dinero: es un problema de ego por parte de gente que buscan la fama a través del deporte.” También reconoce que, aunque hay casos de dopaje en el esquí-alpinismo, “no puedes engañar a la montaña; si lo haces, ella te destrozará.”
